Dado que cada lugar de trabajo es único y puede presentar diferentes desafíos de seguridad, es importante identificar y evaluar los riesgos en cada una de las ubicaciones de su empresa, y luego seleccionar la mejor tecnología de detección de gases para mitigar esos riesgos. He aquí una guía paso a paso.
Considerando los gases
Las empresas utilizan detectores de gas portátiles para alertar a los trabajadores de la presencia de gases combustibles.
Los gases combustibles se clasifican en una de estas tres categorías:
- Gases hidrocarburos
- Gas hidrógeno
- Otros gases combustibles (por ejemplo, amoníaco)
La mayoría de los gases combustibles que pueden ser problemáticos en los lugares de trabajo son compuestos de hidrocarburos como el metano, el butano, el benceno y el propano. Estos compuestos químicos orgánicos sólo contienen los elementos de carbono e hidrógeno. Cuando uno de estos compuestos se mezcla con la cantidad adecuada de oxígeno a una determinada temperatura, el calor rompe los enlaces de los hidrocarburos. El resultado es el dióxido de carbono y el agua, liberándose energía a través del calor.
Una reacción similar se produce con el hidrógeno. Sin embargo, como no hay átomos de carbono involucrados, la reacción sólo produce agua y calor.
Otros gases combustibles que suponen una amenaza en el lugar de trabajo suelen ser más peligrosos por su toxicidad que por su inflamabilidad, aunque ambos problemas pueden darse con estos gases. Utilizando el sulfuro de hidrógeno como ejemplo, la toxicidad se alcanza a las 100 partes por millón, mientras que el gas no se convierte en combustible hasta que alcanza las 40.000 partes por millón.
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Los gases combustibles y su detección
A continuación nos adentraremos en la búsqueda de la solución adecuada para sus factores de riesgo.
Comparación de los tipos de detectores de gases combustibles
Cuando una empresa incluye en su programa cada uno de los siguientes tipos de detectores, aunque proporciona redundancia, también garantiza la fiabilidad. Estos tipos son:
Monitores fijos de detección de gases
Los monitores de detección fijos desempeñan un papel clave en lugares donde existe un riesgo continuo de presencia de gas combustible, sirviendo como primera línea de defensa. Los sensores permanentes están ubicados estratégicamente para proporcionar alertas tempranas, operando continuamente ya que están conectados al sistema eléctrico de la instalación. Los monitores de detección fijos se comunican con otros sistemas de las instalaciones para automatizar los procedimientos cruciales relacionados con las evacuaciones de los trabajadores y las paradas de los equipos. Sin embargo, hay algunas instalaciones que utilizan monitores de área "temporales" como soluciones más permanentes debido a sus capacidades multigás y a otras opciones que ofrecen una mayor flexibilidad.
Monitores de gas de área
No todos los lugares de trabajo son adecuados para los monitores de detección fijos, por ejemplo, debido a la necesidad de entrar en espacios confinados. En esas situaciones, se recomienda normalmente el uso de monitores de área. Proporcionan las ventajas de alerta temprana de los dispositivos fijos de una manera que es independiente de la infraestructura general del sitio, pero también pueden ser fácilmente trasladados y redistribuidos a otro lugar que los requiera. Los monitores de área también se utilizan en situaciones temporales o cuando hay una respuesta de emergencia.
Detector de gas personal
Los monitores personales de gas son dispositivos portátiles que los trabajadores llevan para detectar la presencia de gases en su zona de respiración. Se trata de la última línea de defensa contra la exposición a los gases y, cuando un gas combustible alcanza un nivel predefinido, se avisa a los trabajadores para que evacuen.
Tecnología moderna de detectores de gases combustibles
La amenaza de explosión de gases y vapores inflamables puede causar lesiones graves o la muerte. Si existe la posibilidad de que se produzca una fuga de gas inflamable en su lugar de trabajo, debe conocer las opciones de un sistema de detección de gases combustibles. Hoy en día, hay tres tipos diferentes de sensores en uso:
Sensores de perlas catalíticas (pelistores)
El Dr. Oliver Johnson desarrolló el sensor de combustión catalítica en la década de 1920 en la Standard Oil Company (ahora Chevron). Este tipo de sensor utiliza perlas, también llamadas pellets-resistores o pellistores, e históricamente ha sido la tecnología más utilizada para la detección de gases combustibles.
Sensores de infrarrojos no dispersivos (NDIR)
Unos 50 años más tarde, Kozo Ishida presentó una patente para el sistema de detección de gases por infrarrojos. Aunque en las últimas décadas se han producido avances en este tipo de sistemas, el principio básico sigue siendo el mismo. Ishida desarrolló una forma de hacer brillar una luz infrarroja con una longitud de onda específica a través de una muestra de gas. Si hay gases de hidrocarburos, la longitud de onda de retorno será más débil porque los gases absorben la luz infrarroja.
Sensores del Espectrómetro de Propiedades Moleculares (MPS)
En el año 2020 se produjo el primer avance revolucionario en la tecnología de los detectores multigás en décadas: el sensor espectrómetro de propiedades moleculares (MPS). Aunque los sensores pellistor y NDIR siguen siendo muy utilizados, esta nueva tecnología lleva la detección de gases en el lugar de trabajo a un nivel totalmente diferente. La nueva generación de sensores de gases combustibles mediante la tecnología MPS está cambiando el sector de la detección de gases debido a:
- Detección precisa de múltiples gases inflamables, reduciendo las costosas falsas alarmas
- Ser inmune a los envenenamientos (incluido el envenenamiento de los sensores por la exposición a los silicones)
- No es necesario recalibrar
- Compensación automática de las condiciones ambientales
Los sensores MPS pueden lograr todo esto con muchos de los gases combustibles más comunes, como el hidrógeno, el metano, el etano, el propano, el butano, el pentano, el hexano, el tolueno, el xileno, el etileno, el propileno y el isopropanol.
Este sensor de gases multicombustibles puede clasificar los gases por peso molecular y densidad, con seis clasificaciones posibles: hidrógeno, mezclas que contienen hidrógeno o gas natural, y gases/mezclas ligeros, medios o pesados. Cuando estos datos se utilizan en combinación con los dispositivos conectados habilitados para la localización de Blackline, su empresa puede tener una gran visibilidad de los tipos, las ubicaciones y la frecuencia de los gases inflamables que encuentran los empleados en un lugar de trabajo.
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Hoja informativa sobre el sensor MPS y los gases combustibles
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Nos especializamos en ayudar a las empresas a responder a las emergencias de gases tóxicos y combustibles en tiempo real, con la seguridad de los trabajadores en primer lugar. Nuestra visión es transformar el lugar de trabajo industrial a través de la tecnología de seguridad conectada para garantizar que todos los trabajadores tengan la confianza de realizar el trabajo y volver a casa sanos y salvos.
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